Los humedales como el de la Ribera de la Algaida son zonas idóneas para los murciélagos. En ellos abundan los insectos, por lo tanto alimento, y además hay agua para beber, otro elemento que estos animales suelen necesitar a diario.
De hecho, en el marco del seguimiento que hacemos de la fauna presente en este espacio natural, hemos podido comprobar que la Ribera de la Algaida constituye un lugar importante para ellos, especialmente en otoño e invierno. Pensamos que murciélagos de otras zonas se desplazan aquí en esta época del año, pues la bonanza del clima costero les permite seguir activos, ahorrándose el tener que hibernar.
Pero este lugar presenta un problema para los murciélagos. En la Ribera de la Algaida son muy escasos los refugios. Apenas existen árboles viejos con huecos y tampoco muchas construcciones, de modo que hemos pensado que podíamos ayudarles instalando algunos refugios artificiales para estos mamíferos voladores.
Hace ya dos años instalamos un par de de ellos sobre postes de madera. El resultado no ha sido del todo satisfactorio y hasta ahora los murciélagos solo los han usado de modo temporal, quizás porque están muy expuestos, o quizás porque la entrada es demasiado grande.
Pero no cejamos en nuestro empeño y este año, en el marco del programa “Conociendo la Red Natura 2000 a través del Voluntariado” hemos instalado cuatro refugios más, esta vez en palmeras.
Estos nuevos refugios son mucho más sólidos que los anteriores y la entrada bastante más estrecha (menos de 1 cm), de forma que imitan mejor los refugios naturales, las fisuras, que es lo que buscan los murciélagos del género Pipisitrellus y Eptesicus, los más comunes en este paraje, para formar sus colonias.
En cuanto a la orientación, la mayor parte de los refugios lo hemos colocado hacia el este, para que de este modo no estén todo el día expuesto al sol y queden refugiados de los vientos dominantes, que en esta zona de Almería suelen ser de poniente (oeste).
Pero como esto no es una ciencia exacta, hemos colocado también algunos hacia el norte y hacia el sureste, para comprobar si tiene alguna influencia en la ocupación.
Por último decir que esta acción la considerabamos prioritaria, pues además de estar proporcionando refugios a los murciélagos, estas cajas nos sirven como recurso educativo para explicar a la ciudadanía y a los escolares que visitan la zona la importancia de este grupo animal. Y es que los murciélagos tienen por lo general mala prensa y generan cierta repulsión, pero realmente son nuestros aliados. Son eficaces controladores de plagas agrícolas y también de mosquitos, lo que tiene especialmente relevancia en esta zona de Almería donde estos insectos suele ser un problema recurrente y su tratamiento ha generado ciertas controversias.
Ya solo queda esperar. Los murciélagos suelen tardar bastante en aceptar los refugios pues se sabe que son muy desconfiados.
Esta actividad se enmarca en el programa "Conociendo la Red Natura 2000 a través del Voluntariado", un programa organizado por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, cofinanciado con fondos FEADER.