Logo Proyecto MauremysMauremys es el nombre científico del género del galápago leproso (Mauremys leprosa), la única tortuga de agua dulce autóctona presente en el sureste de España.

¿Por qué este proyecto?

Aunque actualmente el galápago leproso no está catalogado como amenazado en España, todo indica que la especie se encuentra en regresión en determinadas áreas de la península ibérica, debido principalmente a la transformación del hábitat, la excesiva contaminación en zonas agrícolas, desecación de masas de agua y, en menor medida, a la caza furtiva al que ha estado sometida para mantenerla como animal de compañía. A ello se suma la introducción de algunas especies americanas de galápagos, principalmente Trachemys scripta elegans y Pseudemys picta, que compiten con ella por el alimento y el espacio, especialmente a la hora de solearse.

En Almería la especie ha sido poco estudiada, incluso algunas poblaciones, como las de la Sierra de los Filabres o Sierra Alhamilla, han pasado totalmente desapercibidas para la comunidad científica y para las administraciones. Resulta por ello necesario tener datos actualizados para las diferentes poblaciones, constituyendo un requisito fundamental para poder evaluar adecuadamente el estado de conservación de cada una de ellas e ineludible para la adecuada gestión de las mismas.

Descripción y hábitat

El galápago leproso es una tortuga de tamaño medio, de hasta 210 mm de longitud total, que se caracteriza por presentar el caparazón ovalado y aplanado, ensanchado en la parte posterior y con una quilla vertebral ligeramente patente. Este es de color verde pardo o marrón. El calificativo de leproso se debe a que en los ejemplares viejos, el caparazón suele estar muy desgastado y a veces recubierto de algas, lo que le da un aspecto "sucio" que refuerza ese nombre.

Galápagos leprosos en Almería
Grupo de galápagos leprosos tomando el sol. Turre (Almería). Fotografía: © Enrique Ruiz Ara.

Se distribuye por el suroeste de Europa (España, Portugal y sur de Francia) y por el noroeste de África, pero es en la Península Ibérica donde se encuentran las mayores poblaciones de la especie a escala mundial. Esta distribución pone de manifiesto su carácter térmofilo. Prefiere zonas templadas en las que se ve poco obligada a invernar, pudiendo mantenerse activa durante el invierno en los años poco rigurosos climáticamente.

Al galápago leproso le gusta tomar el sol en la orilla del agua. Habita por lo general riachuelos de aguas tranquilas, ramblas de aguas permanentes, humedales costeros, pero también balsas de riego e incluso charcas, si éstas son más o menos permanentes.

Tiene una dieta omnívora, aunque prefiere comer peces, anfibios o insectos, sin desdeñar la carroña y restos vegetales. Son a su vez presa de diversas aves acuáticas, zorros y jabalíes.

Distribución y estado de conservación del galápago leproso en la provincia de Almería

La distribución del galápago leproso en la provincia de Almería refleja a la perfección su carácter termófilo. Al ser un reptil que busca zonas templadas la especie aparece sobre todo en la costa, a pocos metros sobre el nivel del mar.

Las poblaciones más abundantes y mejor conservadas se encuentran en la zona levantina, especialmente en las desembocaduras del Río Aguas, Río Alias y los alrededores de la desembocadura del Almanzora (Rambla de la Canaleja). Aquí sigue siendo una especie relativamente común, si bien no son desdeñables los problemas, en especial la invasión de cañavera (Arundo donax) en algunos tramos y la introducción de galápagos exóticos.

En Sierra Alhamilla y el Parque Natural de Cabo de Gata la cosa cambia un poco. Aquí todas las poblaciones, a excepción de la población del río Alias antes mencionada, aparecen asociadas a ríos de muy poca entidad y totalmente aislados entre si, lo que aumenta nuestro interés por estudiarlos.

Río en Almería

En el Poniente almeriense la especie aparece también asociada a la costa y a los diferentes humedales que aparecen cerca de ella: Punta Entinas, Cañada de las Norias, Ribera de la Algaida y Albuferas de Adra. Esta última destaca por ser la población más abundante, si bien se encuentra actualmente aislada de las del resto del poniente almeriense y del propio río Adra.

Ya en el interior la especie asciende poco en altura. Alcanza los 450 msnm en la zona de Sorbas, donde penetra a través del Rio Aguas. También alcanza esa altura en Tabernas, donde aparecen especímenes asociados a algunas ramblas, en escaso número y en serio peligro de desaparecer.

En Vélez Blanco, aparece entre los 600-700 msnm en el río Alcaide, y aunque este núcleo esta poco estudiado todo parece indicar que es continuación de las poblaciones de Murcia.

Las poblaciones de galápago leproso en la sierra de los Filabres son las únicas estrictamente montanas de la provincia de Almería y es aquí donde alcanzan la mayor altura, aproximadamente los 1100 msnm, cerca del récord altitudinal máximo alcanzado por esta especie en la Península Ibérica.

Son poblaciones poco estudiadas y de las que no existen referencias previas en la literatura. Censos y entrevistas a naturalistas realizadas por nosotros, hacen pensar que la especie se encuentra en claro declive en esta zona, incluso alguna podría haber ya desaparecido, debido principalmente al deterioro de su hábitat.

Mapa distribución galapago leproso en Almería

Distribución del galápago leproso en la provincia de Almería. Fuente: SERBAL.

La sobreexplotación a que están siendo sometidos algunos arroyos de montaña ha tenido como consecuencia que el caudal de éstos sea cada vez más escaso y por lo tanto las pozas de agua de cierta profundidad, indispensables para esta especie, sean cada vez más menos frecuentes.

Por otro lado, la escasez actual de pastoreo y el abandono de los usos tradicionales, han llevado a un crecimiento excesivo de la vegetación de ribera lo que ha llevado a que desaparezcan muchas de las zonas de soleamiento y puesta tradicionales. Esta escasez actual de zonas adecuadas en la que los galápagos puedan solearse resulta crítico, especialmente para estas poblaciones montanas donde el clima es más rigurosos y la especie se encuentra en su límite altitudinal.

¿Qué queremos hacer?

Queremos conocer con detalle el estado actual de cada una de las poblaciones y sus amenazas, y si es necesario llevar a cabo actuaciones correctoras.

Lo primero que vamos a hacer son censos de poblaciones. A lo largo de 2013 y 2014 vamos a realizar muestreos con nasas en diferentes masas de agua con presencia histórica y potencial de esta especie.

Censo de galápago leproso en Almería

Entre las actuaciones de conservación queremos instalar islas flotantes artificiales. Como se ha comentado uno de los problemas de ciertas poblaciones es la escasez de zonas de asoleamiento adecuadas, especialmente las presentes en las pantanetas. Para solucionar esto se propone la ubicación, en medio de estos embalses, de islas flotantes artificiales fijadas al fondo. Se trata de una medida eficaz y sencilla llevada ya a cabo en otras zonas de España con bastante éxito. Además estas islas flotantes facilitan el posterior seguimiento a largo plazo de las poblaciones de galápago leproso.

Queremos también proteger las zonas de puesta, pues muchas poblaciones pequeñas terminan por desaparecer porque sus zonas de puesta sufren el ataque continuado de zorros y jabalíes. Por ejemplo, en los Filabres el crecimiento excesivo de la vegetación ha llevado a que las zonas adecuadas para la puesta sean cada vez más escasas, y más fácilmente localizables por los depredadores.

También es nuestra intención crear y/o adecuar algunas charcas y eliminar cañavera en algunos tramos de río y por último y no menos importante, llevar a cabo una campaña de divulgación y educación ambiental entre los agricultores.