Coincidiendo con el Día Mundial del Medioambiente 2020 y para celebrarlo, el 5 de junio regresamos a La Zarba un pequeño grupo para comprobar como seguían las aproximadamente 4500 bellotas de encina y coscoja y los 213 plantones de encina y quejigo cedidos por La semilla de la abundancia, que plantamos en noviembre del año pasado, y a las que no habíamos podido volver a visitar a causa de las restricciones de movimiento impuestas por la epidemia de COVID-19.
Aunque como ya suponíamos, una parte de las bellotas han sido comidas por jabalíes y roedores, y otras no han llegado a germinar, bastantes han logrado sobrevivir transformándose en pequeñas encinas, especialmente aquellas sembradas con los seed-shelters amablemente cedidos por Jorge Castro Gutiérrez, catedrático de ecología de la Universidad de Granada.
El aljibe estaba a rebosar de agua, lo que facilitó la tarea del riego.
Nuestra intención es, en función de lo que llueva o no este verano, continuar el seguimiento y subir a regarlas en los momentos más críticos para ayudarles a pasar su primer verano.