Este es el primer año que estamos realizando un seguimiento continuo de la migración postnupcial de rapaces en Cabo de Gata y ya vamos teniendo algunos resultados y van surgiendo las sorpresas.
Una de ellas ha sido el avistamiento de un juvenil de buitre negro (Aegypius monachus) sobrevolando las Negras el 27 de septiembre de 2016 y junto a él, como compañeras de viaje, una veintena de águilas calzadas.
Aunque no es la primera que vemos esta especie durante la migración en Almería, no es para nada habitual. El buitre negro es una especie escasa en nuestro país. Está catalogada como Vulnerable y en Andalucía, según el último censo realizado en 2016, hay 398 parejas reproductoras repartidas por las provincias de Huelva, Sevilla, Jaén y Córdoba.
Los adultos son extremadamente sedentarios y apenas se separan de la colonia a lo largo del año, pero los jóvenes en cambio suelen realizar grandes desplazamientos que les llevan fuera de sus áreas de cría, pudiendo aparecer casi en cualquier lugar de la Península, e incluso a cruzar el Sahara hacia el sur o los Pirineos hacia el norte.
Curiosamente tan solo tres días después de nuestro avistamiento los Agentes de Medio Ambiente y el SEPRONA recogían un ejemplar desnutrido en La Venta del Pobre, a escasos kilómetros de las Negras.
Nos preguntamos si será el mismo y pensamos que es bastante probable. La dispersión juvenil y migración es un autentico reto para las aves. Recorren cientos, miles de kilómetros y es relativamente normal que acaben agotadas.
Ahora este ejemplar se recupera en el CREA de las Almohallas, en Vélez Blanco. Seguro que pronto está volando otra vez.